• Los techos continuos de escayola están fabricados a base de escayola y fibra de refuerzo, un producto incombustible e inerte que aumenta la resistencia.
• Los techos desmontables de escayola están compuestos por placas individuales que van colocándose hasta conformar un único techo. La ventaja es que al ser piezas individuales, permiten un posterior manipulación de las placas de forma independiente, lo que también influye en que el mantenimiento sea sencillo y cómodo.

Esta solución además de económica es duradera gracias al material que se emplea. Fácil instalación y multitud de posibilidades decorativas ya que contamos con una extensa gama de diseños que nos permiten acoplarnos a cualquier espacio.

La escayola es un material completamente ignífugo, por lo que cumple con las mayores exigencias en materia de seguridad contra incendios. Su estabilidad es de 120 minutos de exposición al fuego.

Nuestros techos admiten cualquier tipo de pinturas.